lunes, 2 de mayo de 2011

Cinco años atrás

Me dediqué a amarte con los ojos; luego, empecé a hablarte:
Si pudiera sumergirme en tu silencio… sin suplicarte, ni pedirte… sin llorarte… aceptando que te vas…
Si pudiera admitir que no volveré a tenerte entre mis brazos, a reír entre tus labios… a nadar en tus ojos…
Si sólo pudiera decirte adiós, si te dejara marchar… No puedo… Me dueles demasiado… Te me llevas la vida… Adrià, amor mío…
Ven, entierra tu cabeza en mi regazo… No te vayas todavía… no, sin despedirte…
¿Te estás muriendo porque no quieres vivir? ¿O es que ese laberinto oscuro te ha llevado al olvido?... Si me dejaras entrar en tu ausencia y recordarte que eres… que aún sigues siendo… que estoy aquí… que estamos…
¿Te habrás perdido en ti mismo? ¿Quién si no tú podrá salvarte?
No permitas que tu alma te olvide, porque si se niega a ti, me está negando también a mí…
Sigo esperándote, no me dejes rendirme… No te rindas… ¿Has olvidado que te espero?... A nuestro amor todavía le falta derramarse…
¿Sabes, amor mío?, fuera hace un sol maravilloso… ¡Ojalá pudieras verlo!
Nos hemos perdido un verano… No nos perdamos la vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 
;