lunes, 21 de febrero de 2011

P. Fernández Razkin

Hace unos meses conocí en persona aun chico después de mucho tiempo ansiando hacerlo (aun me cuesta creer haberlo conseguido). Junto a él, venía otro chico, nuevo en "este círculo", pero no desconocido, y con ganas de conocerle por mi parte.

Tras disfrutar d ela compañía de N., el primero de ellos, durante un largo período de tiempo y despedirme de él ya que sus amigos (entre los que estaba P., el segundo) le esperaban para largarse a otro lugar (al cual les indiqué de puta madre como llegar, todo sea dicho, jajaja), pensé que jamás podría volver a hablar con ellos.

Dos meses después decidí agregar a N. al Facebook, no sin antes preguntarme mil veces si a él le molestaría que lo hiciese. Me lié la manta a la cabeza y, ¡clic! Añadir a mis amigos. Y, ya que estaba armada de valor, tomé la decisión de agregar a P., al cual me daba aun más coraje puesto que con él no había hablado nada, pero quería tenerle también entre mi lista de amiguitos de Facebook :).

Aceptan. Y yo, mientras tanto, soy la chica más feliz de todo el mundo.

Tras un par de meses como amigos, unos cuantos privados con N. y otro con P., decidí abrir la ventanita del chat de éste último para preguntarle algo.

¿Queréis saber qué me encontré?

Una de las mejores personas con las que he tenido el placer de hablar. Pensaréis que tal vez es algo precipitado, que no he mantenido más de cinco conversaciones con él en total, pero es que P. con tan sólo decir "hola" transmite.

Esa vez fueron algo más de dos horas de conversación dnde, sin conocerme de nada y sin quererlo, me hizo la chica más feliz del mundo, otra vez. Y, claro, su oferta no la pude rechazar. ¿Qué haríais vosotros si una persona a la que admiras muchísimo os invita a iros con ellos (entre los cuales está tu ídolo desde que tenías 12 años) de cañas después de un evento que llevas esperando algo más de tres años?

Y yo sigo sin creérmelo.

Tras varias conversaciones con él, he descubierto a un hombre interesante. A un hombre valiente, que afronta las stuaciones sin bajar la cabeza. A un hombre fuerte, capaz de soportar bestiales críticas hacia él y, aun así, seguir al pie del cañón. P. me ha enseñado que si crees que una cosa puede llegar a salir bien has de luchar por ella, sin importar qué dirán los demás.

Con él he aprendido que lo importante son las ganas a la hora de afrontar los nuevos proyectos, que sin ellas estamos perdidos. P. ha hecho que valore algo más mis dibujos con sus palabras y halagos (por más que insistas, P., entre tú y yo, el único artista que hay eres tú) y su interés. Él ha hecho que las ganas ya existentes por lo nuevo, incrementen y se eleven al cuadrado.

Me ha enseñado qeu la vergüenza es algo que no sirve para nada, que es mucho mejor echarle cojones al asunto para no arrepentirnos nunca de lo que no hicimos. Me ha enseñado lo que es un hombre modesto y, sobretodo, agradecido.

Él es Pedro Fernández Razkin, ex Mr. Fylyn y nuevo cantante de La Fuga y, a día de hoy, yo pongo la mano (y todo lo que sea necesario) en el fuego por él, sus letras, y su voz.

Gracias.




Si aún quedan dudas, N. es Nando :)

1 comentario:

Holy dijo...

Entras ganas de conocer a P... jeje :)
un beso!

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