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Mi único objetivo es hacerte feliz. Prometo no hacer nada que no contribuya a tu felicidad, y mucho menos que se oponga a ella. No estoy ni en un bando ni en el otro. Estoy en tu bando. No soy ni amiga ni enemiga. Soy tuya. Estaré donde tú me digas. Si me necesitas, ahí estaré. Si no me necesitas, no estaré. Si quieres un abrazo, lo tendrás. Si quieres un beso, también. Me iré si quieres que te dejen en paz. Si necesitas un hombro sobre el que llorar, te ofreceré los dos. Si quieres un café y una conversación filosófica, ya sabes dónde encontrarme. Si quieres ir a ver un concierto en pantalla gigante de Wilco, del cual te enteraste en el último momento, te acompañaré. Si necesitas cualquier cosa... el viento me hará llegar tu petición. Si quieres una princesa, me pondré vestido. Si quieres una ogra, iré a verte recién levantada. Si el Destino te sacude de un lado para otro, recuerda que siempre tienes un punto de apoyo. Si tu vida se oscurece por momentos, haré lo imposible por iluminarla. Aunque me lleve la vida.
Porque te veo. Creo en ti. Eres. Me basta.